Rehabilitación
Modernizar las instalaciones eléctricas para reducir la mortalidad en los incendios domésticos

Las causas eléctricas siguen siendo una de las principales causas de una gran parte de los siniestros que se producen en el hogar. Según los datos del “Estudio de Víctimas en Incendios en España de 2020” de la Fundación Mapfre, un 34 % de los incendios en viviendas en los que se registraron víctimas mortales durante 2020 se debieron probablemente a fallos eléctricos, lo que supone la primera causa, al igual que en 2019.
Los arcos eléctricos son una de las causas eléctricas principales de este tipo de siniestros y pueden deberse a múltiples factores: cables en mal estado, mascotas o roedores que mastican el aislamiento, cableado anticuado o sobrecargado, etc. Si bien la mayoría de hogares ya están protegidos contra sobrecargas y cortocircuitos o corrientes de fuga a tierra, no sucede lo mismo con los arcos eléctricos, ya que éstos tienen un comportamiento que los elementos de protección tradicionales no son capaces de detectar.
La firma Eaton recomienda la revisión continuada de los dispositivos de protección para prevenir todo tipo de riesgos eléctrico. Modernizar las instalaciones eléctricas de los hogares es clave, así como disponer de dispositivos capaces de protegerlos de las distintas posibles causas de incendios y garantizar así una mayor seguridad.
Fallos de arco eléctrico
Un ejemplo de este tipo de dispositivos es el interruptor de detección de fallos de arco eléctrico AFDD+ de Eaton, que ofrece protección integral ante los incendios provocados por fallos de arco eléctrico. Gracias a una supervisión electrónica continua de la línea que protege, el dispositivo detecta este tipo de fallos y se dispara de forma automática, ayudando a prevenir los incendios en hogares por causa eléctrica. La ventaja de este dispositivo es que protege contra todo tipo de riesgos eléctricos, ya que combina las funciones de protección de un interruptor diferencial, un pequeño interruptor automático magnetotérmico y un dispositivo de detección de fallos de arco, por lo que es capaz de hacer frente a las descargas eléctricas, las sobrecorrientes, así como los cortocircuitos o los fallos de arco en los cables de alimentación.
Aunque se han reducido en los últimos años, el número de incendios en hogares es aún elevado y para seguir en esa línea es fundamental la modernización de las instalaciones eléctricas, especialmente aquellas con una antigüedad superior a los 40 años, así como que sean sometidas a inspecciones periódicas.