En las instalaciones del antiguo aeropuerto berlinés de Tempelhof, y en presencia del ministro federal alemán de Digital y Transporte, MAN Truck & Bus ha presentado recientemente un prototipo de serie de su próximo camión eléctrico. El modelo estará en el mercado en 2024 y cuenta capacidad de carga de futuros megavatios, una tecnología de carga que ABB E-mobility quiere llevar al mercado en los próximos tres años. Ambas compañías se preparan así para la siguiente fase de la electromovilidad: capacidad operativa para el transporte pesado de larga distancia con una autonomía diaria de entre 600 y 800 kilómetros.

 

Parte de su colaboración consiste también en demostrar que la industria está preparada para seguir adelante, y que los legisladores deben establecer el marco político para el transporte de mercancías por carretera con cero emisiones. Al final de elo está el objetivo de lograr descarbonizar el transporte de mercancías por carretera para alcanzar los objetivos climáticos. MAN confía en las cadenas cinemáticas de baterías eléctricas para las futuras flotas de vehículos comerciales sin emisiones de carbono. El grupo ya participa en una empresa conjunta con socios de la industria para desarrollar y operar una red de carga pública de alto rendimiento con un objetivo de al menos 1.700 puntos de carga de electricidad verde en toda Europa.

MAN y ABB E-mobility abordan una nueva fase de la electromovilidad en el transporte de larga distancia

 

Tecnología de alimentación de más de 1.000 voltios

Para permitir una autonomía diaria de entre 600 y 800 kilómetros, el camión eléctrico de MAN, que se lanzará en 2024, ya está equipado con los requisitos técnicos para los futuros sistemas de carga de megavatios, que ABB E-mobility, tiene previsto introducir en breve en el mercado para facilitar la electromovilidad en todos los ámbitos. La carga de megavatios requerirá una nueva tecnología de alimentación de más de 1.000 voltios, por lo que la seguridad eléctrica y la fiabilidad sistémicas son esenciales a estos niveles de potencia y para los casos de uso previsibles.

Una norma vinculante y uniforme también es crucial para la introducción de la tecnología de recarga de megavatios. Alemania podría marcar la pauta en este sentido: más de 20 socios de la industria y la ciencia, entre ellos MAN y ABB, trabajan en el proyecto de carga de alto rendimiento (conocido como “HoLa” en alemán), financiado por el gobierno alemán y que es el primer proyecto de carga de megavatios del mundo. Se están construyendo dos puntos de recarga de alto rendimiento con sistemas de carga de megavatios (MCS) en cuatro puntos de la autopista federal A2. El proyecto pretende servir de base para su expansión a nivel nacional.