Faconauto, la patronal que integra las asociaciones de concesionarios oficiales de vehículos, y Aedive, Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica, presentaron la semana pasada en Madrid el primer Decálogo de Seguridad del Vehículo Eléctrico para reforzar la confianza de compradores y usuarios en la tecnología. El objetivo es desmontar mediante datos contrastados y protocolos profesionales los principales mitos asociados al vehículo eléctrico y que dañan su reputación con informaciones, a menudo falsas y descontextualizadas, sobre incendios, carga doméstica y mantenimiento.

 

El objetivo es que el Decálogo de Seguridad se pueda emplear como herramienta informativa tanto en concesionarios como en comunidades de vecinos, y para ello es fundamental la labor de los administradores de fincas, que también estuvieron representados en el acto. Esos mitos y percepciones erróneas que generan desconfianza contrastan con los datos que ofrecieron los promotores de la iniciativa al referirse a los vehículos eléctricos, “se incendian con menor frecuencia que los de combustión, el agua es un método eficaz para sofocar posibles fuegos y la recarga doméstica es completamente segura si se realiza conforme a la normativa”.

El documento nace como una guía divulgativa y pedagógica que refuerza el papel del concesionario como canal de confianza y del administrador de fincas como agente facilitador en los entornos residenciales. Ambos desempeñan un rol esencial a la hora de despejar inquietudes, resolver dudas técnicas y contribuir a la adopción de soluciones seguras y bien gestionadas. Los promotores recuerdan también que “la seguridad se transmite con información útil y veraz, respaldada por quienes asesoran y acompañan al cliente en una decisión clave”. El Decálogo, que ofrece respuestas rigurosas a las diez dudas más habituales sobre el uso del vehículo eléctrico, es el siguiente:

  1. Protección por diseño. Los vehículos eléctricos cumplen normativas más estrictas que los convencionales. Sus baterías integran sistemas de supervisión continua desde su concepción para detectar y corregir cualquier anomalía.
  2. Menos incendios, más seguridad. Los vehículos eléctricos sufren menos incendios que los de combustión, desmontando así uno de los temores más repetidos.
  3. Baterías bajo control total. Están monitorizadas las 24 horas. Tecnologías como las baterías LFP (litio-hierro-fosfato) reducen aún más el riesgo de incendio.
  4. Carga doméstica segura. Un punto de recarga instalado por profesionales cualificados garantiza una experiencia segura. Ante cualquier anomalía, el sistema interrumpe el flujo eléctrico de forma automática.
  5. Nada de enchufes domésticos. Usar enchufes tipo schuko durante horas es peligroso. No están preparados para estas exigencias y pueden sobrecalentarse. Es imprescindible instalar un cargador específico.
  6. Mantenimiento mínimo, pero esencial. Aunque requieren menos revisiones, es fundamental seguir el plan del fabricante, especialmente en lo referente a la batería, y hacerlo siempre en talleres cualificados.
  7. Protocolo post-impacto. Si se ha producido un golpe en los bajos del vehículo, conviene revisarlo en taller antes de estacionarlo en un garaje cerrado.
  8. El agua sí apaga incendios. Lejos del mito, el agua es efectiva contra incendios en eléctricos. Los bomberos están formados y equipados para intervenir, y los residuos se gestionan conforme a normativa.
  9. Espacios compartidos seguros. Informar de la presencia de vehículos eléctricos permite adoptar medidas preventivas, como señalizar correctamente las plazas o planificar intervenciones en caso de emergencia.
  10. Profesionales, siempre. La instalación de puntos de carga y cualquier revisión debe estar en manos de expertos cualificados, conocedores de la normativa y los protocolos adecuados.

Un Décalogo de Seguridad para reforzar la confianza de compradores y usuarios del vehículo eléctrico

Una herramienta para reforzar la confianza del cliente

El director general de Faconauto, José Ignacio Moya, afirma que “los concesionarios nos trasladan a diario que muchos clientes creen en las ventajas del vehículo eléctrico, pero aún necesitan certezas técnicas”, y añade también que “en un momento en que la confianza es determinante, el concesionario no solo vende, sino que prescribe movilidad segura, sostenible y bien informada”. No obstante, el mercado evoluciona muy favorablemente en lo que va de año, Arturo Pérez de Lucía, director general de Aedive, señaló que “ha crecido un 67,2 % en lo que va de año, hasta superar las 87.000 unidades matriculadas a final de mayo y se espera que alcancemos las 200.000 en todo 2025”.

En la mesa redonda que siguió a la presentación y en la que se abordaron dificultades a las que se enfrenta el mercado participó, entre otros, la presidenta del Colegio de Administradores de Fincas de Madrid, CAFMadrid, Manuela Julia Martínez, que se refirió a los problemas que presenta la forma en la que se hace llegar el cable desde el contador hasta el punto de recarga en los garajes comunitarios y la dificultad creciente que esto supondrá “cuando sean muchos los vehículos eléctricos en un mismo parking”. También se coincidió en la necesidad de homogeneizar normativas “porque cada comunidad pide una documentación diferente”, o en la conveniencia de instaurar los mantenimientos de los puntos de recarga, “las empresas lo quieren, pero los particulares no, y debería ser obligatorio por seguridad”.

Aedive y CAFMadrid se emplazaron mutuamente para diseñar una hoja de ruta que permita dar a conocer entre los usuarios todos los aspectos relacionados con la seguridad, al objeto de reforzar esa labor divulgativa que se demanda. El Decálogo de Seguridad del Vehículo Eléctrico está disponible para su descarga en www.faconauto.com y www.aedive.es y será distribuido a través de la red de concesionarios y también a través de los administradores de fincas.

Un Décalogo de Seguridad para reforzar la confianza de compradores y usuarios del vehículo eléctrico