Energías renovables
El 7 % de las viviendas unifamiliares y el 2 % de las empresas españolas ya tienen instalación de autoconsumo
La presentación del Informe Anual del Autoconsumo Fotovoltaico, elaborado por APPA Autoconsumo, constata la consolidación del sector, aún cuando las cifras de instalación en 2023 se reducen respecto a las registradas un año antes. Algunos de los datos que se extraen del informe, presentado esta semana en Madrid, indican que el autoconsumo cubre ya el 3 % de la demanda eléctrica en nuestro país o que el 7 % de las viviendas unifamiliares y el 2 % de las empresas ya cuentan con instalación propia de autoconsumo.
Según el estudio de APPA, el autoconsumo supuso en 2023 la instalación de 1.943 MW nuevos, una cifra netamente superior a los 1.706 MW que ha cuantificado por su parte Unef, Unión Española Fotovoltaica y sobre la que en Instaladores 2.0 informamos la semana pasada. En todo caso, ambos coinciden en muchos detalles, como que la potencia instalada disminuye bastante respecto a 2022, pero crece frente a cualquier otro ejercicio anterior. Y también en relación con el hecho de que las instalaciones industriales fueron las que sostuvieron la demanda principalmente el pasado año, con 1.416 MW nuevos, frente a 527 MW nuevos residenciales.
Los datos globales indican que el autoconsumo rompe la barrera de los 7 GW instalados en España, una frontera de que Unef sitúa al borde de ser traspasada, con 6.955 MW. Tras cuatro años de fuertes crecimientos, en los que la potencia anual instalada se había multiplicado por 26, en 2023 se produjo la primera contracción en el ritmo instalador del autoconsumo. Sin embargo, el contraste de ese retroceso es también que supone un crecimiento del 69 % en relación con dos ejercicios antes, el de 2021. En total, según las cifras del Informe, más de 480.000 instalaciones (410.000 residenciales y 70.000 industriales) se benefician en nuestro país del autoconsumo.

«Senda creciente y en línea con el objetivo de alcanzar los 19 GW en 2030”
Igual que en el caso de Unef, en APPA Autoconsumo achacan el descenso a la paulatina desaparición de las ayudas europeas, el encarecimiento de los tipos de interés y la moderación de los precios de la electricidad. La caída fue más acusada en el sector residencial, en el que la potencia instalada fue la mitad que en 2022 (-49 %), que en el industrial, donde la potencia cayó solamente un 13 %. A pesar de ello, el presidente de la asociación, Jon Macías, se mostró optimista, “exceptuando el atípico 2022, el autoconsumo sigue una senda creciente y en línea con el objetivo de alcanzar los 19 GW en 2030”, señaló. En 2023 se llevaron a cabo más de 127.000 nuevas instalaciones, el 88 % residenciales (111.795 viviendas) y el 12 % industriales (15.509 empresas), con una inversión conjunta de 1.863 millones de euros.
Macías también aseguró que el autoconsumo genera ya energía por un valor equivalente al 3 % de la demanda eléctrica y que ha superado en potencia a la tecnología nuclear, aunque lamentó también que existe una ausencia de información sobre sus cifras porque “sólo las asociaciones proporcionan datos sobre potencia y generación”. Asimismo aludió al problema que las grandes instalaciones tienen para verter y comercializar su excedente, de tal forma que sólo el 82 % de la generación se aprovecha, mientras que el 18 % restante se pierde, 1.642 GWh que habrían tenido un valor cercano a los 131 millones de euros.
Datos sobre el promedio de las instalaciones
Otros datos señalan que la instalación media en nuestro país es de 4,7 kW para un autoconsumo residencial, muy similar al tamaño calculado en 2022. Gracias al descenso de los precios, asociado a la reducción de los costes de los equipos, esta instalación habría requerido una inversión media de 7.085 euros y los ahorros durante 2023 (208 euros/kW) de esta instalación habrían supuesto el 14 % de la inversión, lo que implicaría la recuperación de la inversión en solo siete años.
Respecto al sector industrial, la instalación media ha aumentado un 30 %, desde los 70 kW de 2022 a los 91 kW de 2023. En el caso de las empresas, la inversión se recupera en solo cinco años, debido a los mejores precios alcanzados al aplicar economías de escala en las instalaciones, a pesar de que los ahorros (152 euros/kW) son menores que los residenciales.