Economía
156 millones para proyectos innovadores de almacenamiento independiente y térmico
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha resuelto la asignación de 156,4 millones de euros del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) a 35 proyectos innovadores de almacenamiento energético independiente (stand-alone) y a otros 10 de almacenamiento térmico con distintas tecnologías. Este nuevo paquete de ayudas será gestionado por el IDAE, Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, y ofrece la opción de incrementar la potencia de almacenamiento en más de 779 MW, con un aumento de capacidad de 3.400 MWh.
De acuerdo con la resolución definitiva, que puede consultarse aquí, los 35 proyectos de la línea 1 -almacenamiento stand-alone– constituyen desarrollos de baterías con tecnología electroquímica. Una vez en marcha, aportarán en conjunto 2.820 MWh de capacidad de almacenamiento y 690,2 MW adicionales de potencia al sistema. Asturias, con 15 proyectos, es la comunidad con mayor número de expedientes seleccionados y mayor monto de ayudas, 60,8 millones de euros. Le siguen Canarias, con cinco proyectos y 14,9 millones de euros, País Vasco (4 y 9,6 millones) y Cataluña y Cantabria, ambos con tres propuestas cada uno e incentivos por valor de 39,9 millones y 11 millones, respectivamente. El resto se desplegarán en la Comunidad Valenciana (2) e Islas Baleares, Andalucía y Galicia, con uno cada una. Como rasgo destacable, la mitad de los proyectos se ubican en zonas de Transición Justa (10) y de Reto Demográfico (7).
Factores relevantes en el proceso de selección
En el proceso de selección de la convocatoria, además de la viabilidad económica de los proyectos presentados, se han valorado las características técnicas habilitadoras para la integración de renovables, que contribuirán al objetivo general de incrementar la capacidad de almacenamiento y dotar de estabilidad a la red, garantizando el suministro y la operación segura del sistema. También se han ponderado factores como la creación de empleo, la contribución al reto demográfico y a la transición justa, entre otros.
La adjudicación de estos 156 millones se añade a otros 100 millones otorgados en julio a cuatro hidroeléctricas de bombeo. El Gobierno considera que “el despliegue de tecnologías de almacenamiento es clave para la integración de energías renovables y para asegurar la flexibilidad del sistema y la garantía del suministro eléctrico” y estima también que este plan de ayudas “contribuirá a consolidar el almacenamiento como pilar esencial para la flexibilidad y seguridad del suministro eléctrico en la transición hacia un sistema energético renovable y descarbonizado”.
