Conecta con nosotros

Energía

Sara Aagesen presenta en el Congreso la Planificación Eléctrica en el horizonte 2026

Publicado

el

Sara Aagesen presenta en el Congreso la Planificación Eléctrica en el horizonte 2026

La secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, presentó la semana pasada en la Comisión de Transición Ecológica y Reto Demográfico del Congreso de los Diputados la Planificación Eléctrica para el horizonte 2026, que supone una inversión de 6.964 millones y permitirá un ahorro de costes del sistema eléctrico superior a los 1.600 millones anuales, además de maximizar la penetración de renovables en las zonas con mejores recursos y menor impacto ambiental y optimizar el uso de las redes con nuevas tecnologías, como baterías o compensadores síncronos.

 

La Planificación, de carácter vinculante, define las infraestructuras de la red de transporte de electricidad de los próximos años y es “un instrumento clave para el avance de España hacia un modelo de sociedad y de economía descarbonizadas”, en palabras de Aagesen, que añadió que “se ha diseñado con un cumplimiento estricto de los principios de sostenibilidad económico-financiera del sistema eléctrico y máximo cumplimiento de los criterios de respeto al medioambiente”.

 

 Principios rectores novedosos

Aunque atiende a principios rectores clásicos, como garantizar la seguridad de suministro, la Planificación incorpora dos principios novedosos, el primero de los cuales es evacuar la generación renovable en zonas óptimas, con elevados recursos y baja sensibilidad ambiental. Para ello se ha empleado una metodología pionera de catalogación, según la cual se podrán conectar 37.000 MW de nuevas instalaciones renovables y sólo el 13 % requerirá nuevas subestaciones para conectarse. Gracias a ello, las emisiones de gases de efecto bajarán hasta los 17 millones de toneladas de CO2 en 2026 -un tercio del nivel de 2019- y la penetración de las renovables alcanzará el 67 % ese mismo año, de acuerdo con lo establecido en el PNIEC, que la cifraba en el 74 % en 2030.

El segundo principio consiste en maximizar la utilización de la red existente, renovando y ampliando su capacidad, y utilizando nuevas tecnologías, como baterías o compensadores síncronos. Las mejoras de redes ya existentes beneficiarán a 8.000 kilómetros de red, a los que se sumarán 2.700 kilómetros de nuevas líneas y 700 kilómetros de interconexiones submarinas. Los nuevos ejes de transporte sólo se plantean cuando las subestaciones y líneas existentes no son capaces de dar respuesta a las nuevas necesidades.

 

La mayor partida económica, para integrar renovables y mitigar las limitaciones de la red

La secretaria de Estado destacó las 3.200 alegaciones recibidas, “por primera vez ha sido posible la participación directa en el proceso de todos los ciudadanos, empresas y administraciones, algo que se justifica por la relevancia de la red de transporte para el éxito de la transición energética, una transición que debe contar con la participación de toda la sociedad”, aseguró. También subrayó que “en términos económicos y más allá de los principios de eficiencia y sostenibilidad, el volumen de inversión previsto será un catalizador y un dinamizador de la actividad económica que activará especialmente los sectores asociados a la fabricación e instalación de infraestructuras eléctricas”. En este sentido, la mayor partida inversora, el 27 % del total, con casi 1.900 millones, se destinará a la integración de renovables y a mitigar las limitaciones de la red de transporte que impedirían el aprovechamiento de las renovables. Otros 1.550 millones, por ejemplo, se destinarán a garantizar la seguridad, calidad y fiabilidad del suministro.